El efluvio telógeno es una condición común que afecta a hombres y mujeres, caracterizada por una caída intensa y difusa del cabello. Se produce cuando la raíz del folículo piloso interrumpe su ciclo de crecimiento, lo que resulta en una pérdida notable de cabello en un período de tiempo limitado. Aunque puede ser preocupante, es importante destacar que el efluvio telógeno es reversible y, con el tratamiento adecuado, el cabello puede volver a crecer.
¿Qué es el efluvio telógeno?
El efluvio telógeno es una alteración del ciclo de crecimiento del cabello que afecta principalmente a mujeres jóvenes, aunque también puede presentarse en hombres y en personas de edades más maduras. Se caracteriza por una caída intensa y difusa del cabello en la región frontal y parietal de la cabeza, aunque también puede afectar a otras áreas.
Existen dos tipos de efluvio telógeno: el agudo y el crónico. El efluvio telógeno agudo es temporal y reversible, mientras que el efluvio telógeno crónico se prolonga durante al menos seis meses. Ambos tipos de efluvio telógeno pueden ser causados por diferentes factores, como desequilibrios hormonales, deficiencias nutricionales, estrés, cirugías, infecciones, eventos traumáticos o cambios en los hábitos de vida.
Causas
El efluvio telógeno puede ser desencadenado por una combinación de diferentes factores o por una sola causa. En las mujeres, las alteraciones hormonales, como los desequilibrios en los niveles de estrógenos, son una de las principales causas del efluvio telógeno. Otros factores, como los problemas de tiroides, las deficiencias nutricionales (falta de hierro, vitamina B12, ácido fólico, vitamina D o zinc), las dietas restrictivas y el estrés, también pueden contribuir a la aparición del efluvio telógeno.
Durante el embarazo y el postparto, es común que las mujeres experimenten efluvio telógeno debido a los cambios hormonales. Después del parto, los niveles de estrógenos disminuyen, lo que puede debilitar el cabello y provocar su caída. Además, el estrés del propio parto puede agravar esta pérdida de cabello. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el efluvio telógeno durante el embarazo y el postparto es temporal y se resuelve por sí solo después de unos meses.
En los hombres, aunque menos común, el efluvio telógeno también puede ocurrir debido a factores como el estrés y la falta de hierro.
Manifestaciones clínicas y evolución del efluvio telógeno
El efluvio telógeno se caracteriza por una pérdida intensa y difusa del cabello, dejando mechones o pelos aislados en la ducha, el lavabo o la ropa. La caída del cabello puede ser aún más evidente en personas con cabello largo y oscuro. Además de la pérdida de cabello, el efluvio telógeno también puede provocar una disminución del volumen de la melena, lo que puede notarse al recoger el cabello en una coleta. En casos más graves, puede haber una pérdida de densidad capilar que permite ver el cuero cabelludo.
A pesar de la intensidad de la caída, es importante destacar que el efluvio telógeno es reversible y tiene un pronóstico capilar excelente. Nunca conduce a una calvicie total, a menos que el paciente también presente alopecia androgénica. Una vez que se identifica y trata la causa subyacente del efluvio telógeno, el cabello comienza a crecer nuevamente después de varios meses.
Diagnóstico del efluvio telógeno
El diagnóstico del efluvio telógeno se basa en la historia clínica del paciente y en la exploración médica. Durante la visita al médico, se puede realizar un «pull-test» para evaluar la calidad del cabello al tirar suavemente de él. Además, se pueden solicitar análisis de sangre para evaluar los niveles de hormonas, hierro, vitaminas y otros parámetros relevantes.
La tricoscopia digital, una técnica que utiliza un microscopio de mano, también puede ser utilizada para examinar el cuero cabelludo y los folículos pilosos en busca de señales de efluvio telógeno.
Tratamiento del efluvio telógeno
El tratamiento del efluvio telógeno depende de la causa subyacente y de la gravedad de la pérdida de cabello. En muchos casos, una vez que se corrige la causa, el cabello comienza a crecer nuevamente por sí solo. Sin embargo, en algunos casos, se pueden utilizar tratamientos específicos para acelerar la recuperación del cabello.
El lavado frecuente del cabello, al menos de 3 a 4 veces por semana, puede ser recomendado para eliminar el cabello en fase de caída y acelerar la llegada de la fase de crecimiento. Además, se pueden utilizar suplementos vitamínicos y nutricionales para proporcionar los nutrientes necesarios para el crecimiento del cabello. También se pueden recomendar lociones o serums que regulen el ciclo capilar y fortalezcan el cabello en crecimiento. En casos seleccionados y resistentes al tratamiento convencional, se puede considerar el uso de plasma rico en plaquetas.
Es importante destacar que el efluvio telógeno requiere paciencia, ya que el crecimiento del cabello puede ser lento y puede llevar hasta un año para que el cabello vuelva a su longitud y grosor habitual.
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El efluvio telógeno es una condición común que causa una caída intensa y difusa del cabello. Afecta principalmente a mujeres jóvenes, aunque también puede ocurrir en hombres y personas de edades más maduras. Si bien puede ser preocupante, es importante recordar que el efluvio telógeno es reversible y que el cabello puede volver a crecer con el tratamiento adecuado.
Identificar y tratar la causa subyacente del efluvio telógeno es fundamental para su resolución. Además de corregir los desequilibrios hormonales, las deficiencias nutricionales y el estrés, se pueden utilizar tratamientos como suplementos vitamínicos, lociones capilares y plasma rico en plaquetas para acelerar la recuperación del cabello.
Si estás experimentando una caída intensa del cabello, es recomendable que consultes a un especialista para obtener un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado. Con paciencia y cuidado, podrás recuperar la salud y la densidad de tu cabello. En Aribelti puedes hacerte una cirugía capilar de primera, como también un tratamiento PRP capilar.